La mayoría de las especies que existen se reproducen sexualmente; esto quiere decir que para tener decendencia se necesita de la participación de un macho que produce espermatozoides y una hembra que produce ovulos. Un nuevo individuo se origina al unirse un ovulo con un espermatozoide. El ser humano también se reproduce sexualmente y por ello tenemos dos sexos: masculino y femenino. Mujeres y hombres nacemos con órganos sexuales que determinan el sexo; a estos órganos se les llama características sexuales primarias.
Cuadro 4.1 Caracteristicas sexuales primarias
Mujer
|
Hombre
|
Labios mayores y menores
|
Pene
|
Clítoris
|
Escroto
|
Vagina
|
Próstata
|
Utero
|
Vesículas seminales
|
Trompas de Falopio
|
Conductos deferentes
|
Ovarios
|
Testículos
|
Entre los 9 y los 12 años de edad en las niñas y los 10 y los 13 años en los hombres comienza la pubertad, un proceso durante el cual se transforman en mujeres y en hombres. Durante esta etapa aparecen poco a poco las características sexuales secundarias, que son las que diferencian a hombres adultos de mujeres adultas.
Cuadro 4.2 Caracteristicas sexuales secundarias
Mujer
|
Hombre
|
La voz permanece aguda
|
La voz se torna grave
|
Crecimiento de mamas (senos)
|
La espalda y el torax se ensanchan
|
Crecimiento de vello en axilas y pubis
|
Desarrollo de vello en axilas, pubis y otras partes del cuerpo
|
Ensanchamiento de la cadera
|
Crecen los testículos, el escroto y el pene
|
Comienza la producción de ovulos, y con ello, el ciclo menstrual
|
Comienza la producción de espermatozoides
|
Las características sexuales secundarias aparecen como respuesta a cambios hormonales. Primero, la glandula hipófisis libera unas hormonas llamadas gonadotropinas u hormonas estimulantes de las gonadas, que a travez del sistema circulatorio llegan a los testículos y a los ovarios, y los estimulan a producir otras hormonas llamadas sexuales. Los ovarios producen dos hormonas sexuales: estrógeno y progesterona, y los testículos producen testosterona. Las hormonas sexuales viajan por el sistema circulatorio a todo el cuerpo y estimulan a otros órganos y tejidos; producto de esta estimulación es la aparición de las características sexuales secundarias.